Desde el primero de diciembre los colombianos no podrán importar teléfonos móviles mediante servicios de mensajería. ¿Cuáles son las implicaciones de esta medida?
El Decreto 2025 de 2015 que expidió el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo tiene un parágrafo que levantó polvareda en el sector de las telecomunicaciones. El parágrafo 2 del primer capítulo reza textualmente: “No se permitirá la importación de teléfonos móviles inteligentes o teléfonos móviles celulares, o partes, bajo la modalidad de tráfico postal y envíos urgentes”. Esta disposición podría afectar, en primera medida, a los usuarios que compran equipos celulares por internet, mediante plataformas como Ebay o Amazon. La discusión sobre este decreto apenas comienza, pero una de las aristas más polémicas es la prohibición para importar partes, ya que el negocio de varias empresas y particulares es traer partes específicas de un equipo para poder solucionar desperfectos.
La explicación estatal está en el propio decreto. Entre las consideraciones se puede leer que estas medidas se toman con el fin de combatir el hurto de teléfonos inteligentes. El Ministerio de Comercio argumenta que “el hurto de teléfonos móviles inteligentes y teléfonos móviles celulares tiene carácter transnacional, y esta decisión fue solicitada por la Comunidad Andina”.
Este decreto también cuenta con las firmas del ministro de las TIC, David Luna, y el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas. No es un tema menor. El Min Tic tendrá que coordinarse con la DIAN para verificar el ingreso de equipos al país, mientras que el Ministerio de Defensa se encargará de los temas policivos de la medida. De acuerdo con la explicación que entrega el decreto, la Comunidad Andina considera que limitar la importación de equipos y partes es “un instrumento fundamental para desestimular su comercialización tanto a nivel local como en mercados de la Subregión y mitigar la problemática”. Además, señala que es necesario mejorar el intercambio de información de equipos terminales móviles extraviados, robados o hurtados y recuperados en la Comunidad. Las cifras de esta problemática todavía son alarmantes. Según estadísticas del Min Tic, siete de cada diez celulares robados terminan en el exterior. La modalidad de enviar o recibir partes de equipos móviles tuvo un aumento exponencial desde el 2011, de acuerdo con los datos oficiales. Se calcula que cada minuto se roban dos celulares en Colombia. El exministro de las TIC, Daniel Medina, indicó que la medida prohíbe la importacion por servicio postal. "Ello sólo se justifica si la habilitacion del IMEI tiene problemas en la base de datos, lo cual no debería suceder. El operador sólo habilita el móvil si el IMEI está bien. No me queda claro por qué prohibir importacion por e-commerce". Medina cuestionó, además, si el decreto afecta la competencia y por ende los precios al usuario colombiano que quiere adquirir celulares inteligentes. Por su parte, el senador del Centro Democrático Alfredo Ramos, uno de los expertos en temas de telecomunicaciones, calificó la medida en Semana.com como “ingenua e inocente”. Para Ramos, este decreto del Gobierno no enfrenta el problema de fondo que hay alrededor del hurto de celulares. “Estas mafias son transnacionales y tienen otros métodos para mover los equipos y partes robados, no sólo los correos certificados”, aseguró. Semana.com también consultó con importadores particulares de partes y equipos. Coincidieron en que no es positivo equiparar las transacciones e importaciones legales con las que realizan por debajo de cuerda los delincuentes. “Nosotros como personas del común ya no podremos comprar en Amazon o Ebay la pantalla para nuestros celulares porque estaríamos fuera de la ley”, explicó uno de ellos. “A mí, por ejemplo, me dañaría el negocio. Yo traigo de China los repuestos para celulares y, según ese decreto, no podría volver a hacerlo. Me tocaría comprarlos acá en Colombia, a unos cuantos, al precio que quieran”, indicó uno de los importadores consultados. Por ahora, ninguno de los ministerios se ha pronunciado sobre los alcances de este decreto, a pesar de las consultas hechas por este medio. Los fabricantes de equipos consultados también están estudiando sus pronunciamientos sobre esta espinosa decisión. La polémica está servida.